La disminución de audición puede aparecer en cualquier momento por diferentes motivos. Es habitual que se pierda una cierta capacidad a medida que pasan los años o tras someterse a sonidos fuertes por un tiempo prolongado. Pero hay más razones por las que se puede perder la capacidad de escuchar. A continuación te mostramos dos, las enfermedades crónicas y los medicamentos.

Enfermedades crónicas que pueden afectar a la pérdida auditiva

Hay algunas enfermedades crónicas que pueden afectar a la pérdida auditiva. Como su nombre indica se trata de enfermedades degenerativas que avanzan lentamente y que provocan una disminución gradual del sentido del oído. Estas son tres que pueden tener un descenso de agudeza auditiva como resultado del padecimiento.

Otitis

La otitis es una enfermedad muy común tanto en pequeños como en adultos. Se trata de una infección que, de no curarse bien, puede convertirse en crónica. Las repeticiones continuadas de esta enfermedad terminan por mermar la capacidad auditiva.

Mastoiditis crónica

La mastoiditis crónica es una extensión de la otitis. La infección se desplaza desde el oído y llega hasta el hueso mastoideo del cráneo, causando episodios más o menos frecuentes de sordera. Esta dolencia ha ido creciendo en los últimos años.

Enfermedad autoinmunitaria del oído interno

Este tipo de enfermedad autoinmunitaria crónica también puede provocar pérdida auditiva. Además, puede provocar acúfenos y sensación de plenitud auditiva fluctuantes.

Medicamentos que pueden afectar a la pérdida auditiva

Algunos medicamentos también pueden provocar pérdida auditiva. Puedes encontrarlos como un efecto secundario pasajero. Estos son algunos de los más comunes:

  • Analgésicos. Incluso los analgésicos comunes pueden causar pérdida auditiva, como es el caso de la Aspirina. Eso sí, si se toman en cantidades muy elevadas.
  • Antiinflamatorios. El ibuprofeno, el naproxeno y similares pueden reducir la circulación en la cóclea, con la consiguiente pérdida de audición.
  • Antibióticos. Pueden derivar en problemas auditivos si se utilizan de forma prolongada y en altas cantidades.
  • Antidepresivos. Los antidepresivos pueden mermar notablemente la capacidad de escuchar, además de provocar frecuentes tinnitus.
  • Quimioterapia. Algunos medicamentos como la cisplatina -Platinol- o la vincristina -Oncovin- pueden dañar considerablemente el sistema auditivo.

Si sufres las consecuencias de una enfermedad degenerativa o tienes que someterte a un tratamiento prolongado que afecta al tu capacidad auditiva, pídenos ayuda. En Claso disponemos de más de cien modelos de audífonos para elegir uno que se adapte a tus necesidades.