En Claso seguimos con nuestra misión incansable de contarte todo lo que podamos acerca de las distintas dolencias, enfermedades y lesiones relacionadas con la audición. Vaya por delante que no lo hacemos con ningún ánimo de generar alarma ni nada remotamente parecido, sino con la intención de que estés todo lo informado que sea posible de cara a poder identificar estas situaciones, y saber darle la mejor solución posible.

Un colesteatoma es la formación de un quiste en el oído medio. Se produce por la acumulación de epitelio escamoso y residuos de queratina. Con el tiempo se adhiere al tejido de la pared y aumenta su tamaño, generando hipoacusia temporal o crónica. Te damos más detalles sobre el colesteatoma.

Las causas del colesteatoma

El colesteatoma, como acabamos de mencionar, es una inflamación que tiene lugar en el oído medio y que está causada por un exceso de epitelio escamoso proveniente del canal auditivo externo. Normalmente, el oído medio está recubierto con el epitelio mucoso, mientras que el canal auditivo externo lo está con epitelio escamoso.

Aunque el colesteatoma es igual con independencia de dónde se forme, su origen puede ser diferente. En casi todos los casos tiene cura, aunque la causa de su aparición determinará el tratamiento a seguir. Estos son los principales factores que pueden desembocar en este problema.

Colesteatoma congénito

Es el tipo de colesteatoma más raro y ocurre típicamente en niños. Aparece detrás de los tímpanos intactos en niños que no han tenido previamente enfermedades del oído medio . Algunos bebés presentan este tipo de problema al momento de nacer. Es poco frecuente, pero se puede solucionar con cirugía. No suele dejar secuelas, siempre que la detención y la intervención se realicen en un corto espacio de tiempo.

Colesteatoma adquirido

El colesteatoma se produce cuando la dolencia es causada por una acumulación de detritos fruto de la alteración de un oído sano. Hay dos tipos, el colesteatoma adquirido primario y el secundario. El primario es el más frecuente, y tiene lugar en aquellas personas que tienen una alteración crónica del funcionamiento de la Trompa de Eustaquio. El secundario tiene lugar cuando las células descamadas del epitelio llegan al oído media a través de una perforación o ruptura del tímpano.

El colesteatoma adquirido primario se forma como una retracción de la membrana timpánica. Ocurre principalmente en la “pars flaccida” de la membrana timpánica, aunque también se puede dar en la “pars tensa”.

El colesteatoma secundario es menos frecuente. Se suele dar en el oído medio como resultado de la migración de deshecho tras una operación, trauma, el mal funcionamiento del oído o repetidas infecciones. La colocación de un tubo de ventilación o una timpanoplastia puede perforar la membrana y facilitar la entrada del material orgánico no deseado.

Los síntomas y tratamientos del colesteatoma

Puede existir un colesteatoma si se detecta pérdida de audición, dolor, segregación de líquido maloliente o mareos. Si se tiene cualquiera de estos, lo mejor es apresurarse a buscar ayuda profesional. Actuar con rapidez puede minimizar daños en el oído y algunas de las secuelas, como la pérdida parcial o total de la audición, infecciones y la pérdida de sensibilidad en músculos faciales.

Para tratarla es necesaria la cirugía, ambulatoria en la mayoría de los casos. Los métodos más comunes para detectar un posible caso de colesteatoma incluyen la tomografía axial computarizada, usada para discernir con detalle el alcance de la destrucción ósea, y un test auditivo, pues como hemos mencionado ya varias veces, los pacientes con colesteatoma sufren de pérdidas auditivas, generalmente de tipo conductivo que solo afecta el oído externo.

Por desgracia, la única forma de curar de forma definitiva un caso de colesteatoma es mediante una operación quirúrgica. Si bien las infecciones potenciales que pueda generar esta enfermedad se pueden tratar mediante antibióticos, al realizarse la operación ya se quitará el tejido causante del colesteatoma de forma completa, eliminando las posibles infecciones. Si todo va bien, una segunda operación, comúnmente una timpanoplastia, puede recuperar parte de la capacidad auditiva perdida.

Mencionar que algunas operaciones pueden llegar a ocasionar pequeñas lesiones en el oído operado, con potenciales pérdidas auditivas y casos de tinnitus. Lo primero puede ser solventado mediante el uso de audífonos, como los que podréis encontrar en nuestra amplia y variada selección.

Como ves, el colesteatoma no es una enfermedad menor, y hay que tratarla con celeridad, así que si sientes alguno de los síntomas mencionados, no dudes en consultar con un especialista.

Si el oído ha sido dañado, tal vez se requiera cirugía reconstructiva o el uso permanente de audífonos. Ante cualquier síntoma de los mencionados, acude a una consulta en Claso. Acércate a uno de nuestros locales, llámanos por teléfono o escríbenos al correo electrónico para pedir cita. Y como siempre decimos, si quieres más información acerca del tema que sea, contacta con nosotros sin dudarlo, y estaremos encantados de atenderte.