Entre el 3 y el 6% de los niños sordos de un oído no ha sido diagnosticado de esta enfermedad. ¿Has oído hablar de la hipoacusia unilateral?

 

Lo confirma la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello. Entre el 3% y el 6% de los niños sordos de un oído todavía no han sido diagnosticados por los que no han recibido un tratamiento adecuado. Esta dolencia tiene nombre propio. Se trata de la hipoacusia unilateral o pérdida auditiva unilateral. Es posible que pienses que es un porcentaje menor pero no por ello debemos olvidarnos de esta situación que dificulta su desarrollo y aprendizaje desde el primer instante.

 

El pasado 3 de marzo fue el Día Internacional de la Audición. Ese mismo lunes publicamos un artículo en nuestro blog sobre el fenómeno “Oigo pero no entiendo” pero, como apasionados de la audición, queremos seguir poniendo sobre la mesa otras dolencias que a veces pasan desapercibidas. La hipoacusia unilateral es una de ellas.

 

¿Qué conlleva la hipoacusia unilateral?

 

Los niños que la padecen tienen un oído sano pero en el otro, una pérdida de entre 25 y 70 decibelios, en términos generales. Y es que hay distintos grados, desde la leve (con pérdidas de entre 25 y 39 dBHL), moderada, severa o profunda, con más de 90 dBHL de hipoacusia en uno de los oídos.

 

El objetivo es no pasar por alto estos casos ya que las consecuencias influyen en el desarrollo y aprendizaje durante la infancia, con reducciones sustanciales en la percepción del habla. El bajo rendimiento académico no es casualidad pero además, como es lógico, la calidad de vida de estos pequeños también nota los efectos.

 

La probabilidad de sufrir la hipoacusia unilateral en un recién nacido es de 0,1% y aumenta al 0,27% a los cinco años.

 

 

Si tienes hijos pequeños y has notado un cambio en su rendimiento escolar o, simplemente, intuyes que puede estar sufriendo una pérdida en el oído, fíjate en estas otras señales que podrían indicarte que algo no va bien.

 

  • Si siempre muestra predisposición por el oído sano.
  • Si le hablas por la espalda o desde cierta distancia, tiene complicaciones para contestar. De hecho, otra de las señales de alerta es que se basa en la lectura labial para completar la información que recibe.
  • Si se muestra más cansado que de costumbre. La hipocausia unilateral les requiere más esfuerzo en sus tareas diarias. Eso hace que, al terminar el día, estén más cansados. 
  • Si no conoce el origen del sonido. ¿Cómo lo notarás? Fíjate en tu pequeño cuando esté con otros amigos. Si mueve la cabeza demasiado lo puede estar haciendo para no aislarse en un grupo de amigos, mientras intenta descubrir de dónde proviene un sonido.
  • Si su autoestima es baja. Ellos tampoco saben qué les pasa y su confianza se ve afectada.

 

Un implante coclear es una de las soluciones que existen actualmente para los niños y niñas con pérdida auditiva unilateral profunda. Acostumbrarse, para ellos, es realmente fácil y rápido y desde el primer instante, notarán cambios en su día a día. Aun así, recordamos que cada caso es único y no se pueden generalizar ni tratamientos ni diagnósticos.

 

Para eso, cuenta con nosotros, que estamos a tu lado para que tu salud auditiva y la de los tuyos te haga sonreír.